Lo más destacado del episodio con el Dr. Paul Anderson

• A través de su vasta experiencia en la investigación de la oncología integrativa, el Dr. Anderson notó un lado del tratamiento del paciente que a menudo se pasaba por alto: la emoción.

• Los tratamientos estaban tan centrados en los cambios físicos que debían llevarse a cabo, como cambios en la dieta, remedios, etc., que el aspecto mente-cuerpo de una enfermedad pasó a un segundo plano.

• Decidió escribir un libro sobre la conexión mente-cuerpo y la emoción.

• ¿Cómo normalizamos los sentimientos de dolor y derrota y transmutamos esos sentimientos en el empoderamiento que conduce a una curación más completa? 

• ¿Qué modelo podemos usar para ayudar con esto? 

• Permitir que el cuerpo sienta y llore un diagnóstico suele ser el primer paso para sentirse empoderado, lo que lleva a una mejor experiencia con el tratamiento.

• El empoderamiento, incluso a través de las dificultades de cualquier enfermedad, se asocia con una mejor calidad de vida, manejo del dolor, etc., y aunque estos diagnósticos, por supuesto, no son fáciles de manejar, verlos de la manera más positiva posible es beneficioso para combatirlos.

• Esto es especialmente importante debido a la fuerte correlación mente-cuerpo y su efecto sobre la salud física. Una mentalidad empoderada prepara mejor el cuerpo para manejar cada situación y conserva la energía para usarla en la curación.

• Hay varias herramientas que se pueden usar para ayudar a superar todos los sentimientos que rodean el proceso de curación, o incluso los sentimientos que son más desesperantes.  La terapia puede ayudar a abordar las emociones difíciles que rodean el diagnóstico. Limpiar la ira, la confusión, la tristeza, etc. que están asociados con la energía estancada o la negatividad. Aferrarse a este tipo de sentimientos puede conducir a una respuesta emocional suprimida, lo que podría tener un efecto físico negativo en el cuerpo y posiblemente afectar su capacidad para sanar, o incluso conducir a una enfermedad mayor.  La terapia, ya sea sola o con otras personas, puede ser un gran recurso para ayudar a superar algunas de las emociones difíciles que acompañan a los diagnósticos. 

• Limpiar estas energías es importante para que el cuerpo pueda gastar toda su energía luchando contra el intruso.

• Limpiar las energías negativas alrededor del cuerpo es igual de crucial. Limitar la exposición a ciertos familiares y amigos es beneficioso si no se pueden respetar los límites.

• Es importante recordar que no importa cuál sea el diagnóstico, la elección de verlo de manera positiva o negativa aún está bajo su control. Sin embargo, la positividad es contagiosa y puede inspirar a una persona a manejar sus emociones de manera más positiva si ve que otra persona hace lo mismo. 

• Sobre todo, en este tipo de situaciones, es importante centrarse principalmente en uno mismo primero.  En la sociedad se nos enseña que esto es egoísta, sin embargo, cuando se trata de mantener los límites emocionales y un entorno positivo durante la curación, es tan importante como cualquier otro aspecto de cualquier plan de tratamiento.

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