¿Qué terapias se utilizan en la medicina biorreguladora?
La medicina biorreguladora es una forma de medicina personalizada que adapta el tratamiento a las características, necesidades y preferencias únicas de cada paciente. Reconoce que individuos con síntomas similares pueden tener diferentes enfermedades subyacentes y responder de forma distinta a los mismos tratamientos.
Filosofía fundamental
La medicina tradicional suele centrarse en la supresión de los síntomas. En cambio, la medicina biorreguladora busca identificar y abordar las causas profundas de la enfermedad. Enfatiza la importancia de tratar al individuo, no solo la enfermedad.
Enfoque diagnóstico terapéutico
La medicina biorreguladora integra una amplia gama de herramientas de diagnóstico para comprender a la persona en su totalidad, entre ellas:
Integridad estructural
Individualidad bioquímica y deficiencias nutricionales
Predisposiciones epigenéticas
Procesos reguladores y metabólicos
desequilibrios energéticos
Dinámica psicoemocional (por ejemplo, trauma, pérdida)
Prácticas terapéuticas
El tratamiento en medicina biorreguladora es tan individualizado como su diagnóstico. Las terapias se basan en la ciencia, el arte y la creatividad del profesional y van más allá de los enfoques convencionales.
Estas terapias abordan:
Trastornos estructurales y funcionales
desequilibrios energéticos
Trastornos de regulación y adaptación
Desafíos sociales y psicoemocionales
Todas las terapias se enmarcan en el paradigma mente-cuerpo, centrándose en la interconexión de la salud física, emocional y energética.
Modalidades terapéuticas
La medicina biorreguladora utiliza una amplia gama de terapias. A diferencia de las herramientas de diagnóstico, estas modalidades son demasiado amplias y multidimensionales para categorizarlas con precisión. A continuación, se presenta una muestra de terapias comunes y menos conocidas que se utilizan en clínicas de todo el mundo. Esta lista no es exhaustiva, pero ilustra el alcance global de las prácticas biorreguladoras.
REGULAR, ADAPTAR, REgenerar y AUTO-SANAR
Los muchos métodos terapéuticos de la medicina biorreguladora están orientados a la vida y patrones de desarmonía únicos del individuo. Los métodos de curación están diseñados para enfatizar su potencial para regular, adaptar, regenerar y autocuración. Esto se logra a través de la combinación individualizada de la antigua sabiduría sanitaria junto con los avances tecnológicos científicos actuales.
El término regular cuando se aplica a la medicina bioreguladora se refiere a la flexibilidad, la dinámica y el ritmo natural inherentes del organismo. La promoción terapéutica del proceso de regulación del cuerpo es de importancia central.
El término adaptar cuando se aplica a la medicina biorreguladora implica el concepto de lograr y mantener el equilibrio dentro de las cambiantes circunstancias ambientales, emocionales y psíquicas. Esto implica mantener la integridad del sistema nervioso central y autónomo, la inmunidad humoral y celular, la función endocrina y las otras fuerzas vitales energéticas que rigen la adaptación al entorno.
Los términos regenerar y autocuración son similares para definir la terapia biológicamente orientada. Toda curación, en esencia, es autocuración e involucra las fuerzas regenerativas del organismo.
Los procesos de la enfermedad son difíciles de reducir a una colección de eventos lineales. La mayoría de los tumores malignos son de origen multifactorial y, en consecuencia, tienen múltiples objetivos que abordar cuando el objetivo es un tratamiento exitoso. El profesional biológicamente orientado ayuda a facilitar este proceso generalmente a través del uso de una amplia variedad de modalidades terapéuticas no invasivas y no tóxicas.